En el momento en que contactan con el órgano vomeronasal, éste se encarga de enviar una señal al hipotálamo
Las ventosas de plástico, por su lado, están diseñadas para dejar que se haga el vacío en su interior sin precisar que se utilice el fuego para ello. Una pera de goma o una bomba de absorción dejan extraer el aire del interior de estas ventosas una vez puestas sobre la piel.